Pirotecnia

Por Francisco Javier Mares

En alguna nota perdida en los portales de los medios, se lee que en el municipio de León, de 2017 a 2019, decomisaron dos toneladas de cohetones. Llama la atención, más que el volumen, que nadie ponga remedio a la compraventa y conductas que han costado cientos y cientos de vidas.

De acuerdo con Fiscalización municipal, esos artefactos se han retirado de tianguis, de la Central de Abasto y de la vía pública; que en fechas y temporadas determinadas, realizan ‘operativos’ para su decomiso.

Por supuesto, que el año que recién concluyó el trasiego de los artículos de marras ha sido menor al de los dos anteriores -las autoridades, todas, siempre se reservan un espacio para colar cualquier dato que suponen significa un avance. Son así-. Que luego se destruyen bajo la supervisión atenta de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Sedena. Concedamos, pues.

La realidad es que en estos asuntos las autoridades suelen voltear hacia otro lado y fingen que tapan el pozo, así sea después del niño ahogado. Aquí vamos:

En Chiapas y en Puebla todavía huele a pólvora. Se registraron sendas explosiones en bodegas de cohetones, esta semana de año nuevo. La historia de siempre.

¿La venta soterrada en los mercados? Ajá. En el tramo de la carretera Irapuato-Silao se han autorizado dos tianguis de cohetones en ambos sentidos del tránsito -es de suponer que para alentar la compra-. Nos dicen, eso sí, que en cada una de las casetas endebles de los comerciantes, disponen de un barril con arena y otro con agua. Ah, bueno. Seguridad garantizada.

¿Cómo es que acá, en Guanajuato, en sus municipios, a ninguna autoridad se le ocurre, por ejemplo, sentarse con los barones de la Iglesia Católica y les pide encarecidamente que desalienten esas prácticas de su feligresía en cada peregrinación, en cada fiesta parroquial..? Vaya usted a saber. Hay celebraciones a los santitos cada día de todos los años.

Pero el asunto se pone peor. León está a días de iniciar su feria anual -que en realidad es Feria Estatal, así que el gobernador Diego Sinhue Rodríguez algo podría decir-. Cohetones todas las noches, a las 20 horas. La propia autoridad encabezando los desmanes.

Porque, a ver. en las redes sociales, muchísimos usuarios dan la batalla contra los fuegos artificiales, entre otros efectos, por el daño que hacen a las mascotas ¿Qué tal que un reportero se cuele a la muestra ganadera a esa hora para atestiguar y evidenciar las reacciones de los animales en exhibición a la hora de los artificios?

No hace mucho. Una fiesta especial y oficial llenó de humo desde el Parque Explora, cada noche de la ciudad. Y vaya que la municipalidad la defendió hasta el hartazgo.

Habría que agegar las fiestas patrias y las costumbres de la barriada, para tener el cuadro completo. La autoridad bien podría ahorrarse la simulación y las lamentaciones, en ocasión de las tragedias. Harto que les gusta la fiesta.

INSABI

Este 1ero. de enero murió el Seguro Popular. Lo enterró el nuevo Instituto Nacional de la Salud para el Bienestar, el Insabi. Invento de la 4T que encabeza desde la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador.

La propaganda dice que a partir de ya, el IMSS y el ISSSTE atenderán de manera gratuita y proverán de medicina, también sin costo, a todos los mexicanos que hasta ahora carecieron de seguridad social. Nada más unos 69 millones de ciudadanos.

Para ello, no necesitarán de afiliación alguna ni el pago de cuotas anuales, bastará con que presenten su credencial del INE, su CURP o su acta de nacimiento. Parece demasiada belleza como para ser cierto, pero eso es lo que sostienen los equiperos del ‘peje’.

Y si ahora, a los que atienden en el IMSS y en el ISSSTE, lo hacen como todo mundo sabemos, es difícil imaginar de dónde van a salir los recursos materiales y humanos, para ocuparse de la inmensa demanda que se avecina. Ah, dicen en el gobierno federal, es que se van a rehabilitar cientos de clínicas que las administraciones anteriores dejaron abandonadas -sí, por corrupción, aseguran-, y se va a ‘basificar’ el trabajo de todo el personal que sea necesario. Lo dicho, casi el paraíso… en la teoría.

En síntesis, son tres los requisitos: claro, estar en el territorio nacional; carecer de afiliación al IMSS o al ISSSTE; y llevar su identificación. Universalidad, igualdad e inclusión, son los criterios. Listo.

La iniciativa, por supuesto, no es bien recibida en Guanajuato, la única entidad en la que fue derrotado Andrés Manuel, además, con cifras de afiliación al Seguro Popular que solían ser, a la hora de los discursos, la envidia del resto del país. Sí, aunque esto también es una trampa: si tantos iban al Seguro Popular es por que no tenían acceso a los servicios institucionales de tradición. Materia para la polémica… o para el diálogo de sordos. Cosa de definir las simpatías.

LA JAULA

En Año Nuevo, balaceras en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Los ciudadanos, refugiados en los centros comerciales -en escenas que ya vimos antes-. Hay cuatro muertos, todos, del bando de los malos, dicen, ¡bienvenidos al 2020!

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