Las siete llaves

Por Francisco Javier Mares

En una definición largamente sopesada -Marcelo Ebrad, dixit-, en salvaguarda de los derechos y los ingresos de los trabajadores -al otro extremo los empleadores protestan la ausencia de un plan fiscal de respaldo a las empresas-, el Consejo de Salubridad General declaró emergencia sanitaria al COVID-19, por causa de fuerza mayor.

Obliga a los sectores público, privado y social a suspender de manera inmediata todas las actividades no esenciales.

Son siete medidas obligatorias en todo el país, que pondrán a prueba la coordinación entre los niveles y órdenes de gobierno; la capacidad de respuesta cierta de cada entidad y municipio a exigencias inéditas; la prioridad del bienestar colectivo sobre los intereses económicos o políticos particulares, de grupo, sector, partido y afinidad ideológica; la generosidad de los ciudadanos.

Son estas las siete llaves:

1. Suspensión inmediata de actividades no esenciales del 30 de marzo al 30 de abril.

Son actividades esenciales y no hacen alto: la atención a emergencias laborales y de salud de los sectores público y privado. La  seguridad pública, la actividad legislativa -seguro es un decir- y los programas sociales del gobierno. Los comercios deben cerrar. Las fábricas deben cerrar. No se justifican los despidos ni el recorte a los salarios -Aquí entrarían las autoridades laborales que en Guanajuato dijeron ‘vámonos de cuarentena’, y que siguen en ‘Home Office’.

2. En los sectores esenciales, no realizar reuniones de más de 50 personas, -y aplicar las medidas de la sana distancia-.

En el foco, las filas de las fuerzas de seguridad y las concentraciones de guardias médicas.

En ‘Tigres…’, le adelantamos que la nueva Clínica 58 del IMSS se asignaría a la atención al COVID-19. Ahí, las autoridades de la institución ni siquiera han sido capaces de proveer de insumos al personal médico y de enfermería, menos la unificación del ánimo de sumar esfuerzos. Ya informarán las autoridades, suponemos, qué acciones emprenderán en sitios como los asilos, las casas hogar, el tutelar de menores…, y los Ceresos.

3. Se exhorta a toda la población a cumplir con el resguardo domiciliario en las fechas señaladas. El resguardo es voluntario.

El #QuédateEnCasa del subsecretario federal de Prevención y Promoción de la Salud. Hugo López-Gatell, caló hondo. Cuando le preguntan qué garantías tiene México de evitar la ruta que transitaron Italia o España, responde: Ninguna. Entonces argumenta que la única posibilidad es evitar en la mayor medida posible los contagios. Y la manera mejor de hacerlo es el #QuédateEnCasa y la ‘Sana distancia’.

El punto aquí es que la mexicana no despunta como una sociedad disciplinada para acatar la instrucción; con los recursos económicos necesarios para recluirse; y con normas de convivencia que pasen de largo la eventualidad del conflicto. Fuentes acreditadas advierten de la violencia intrafamiliar en aumento; las redes sociales, de las riñas vecinales que amagan con salir de control.

4. El resguardo se aplica de manera estricta a toda persona mayor de 60 años o con enfermedades que la hagan vulnerable al virus.

Esto suena aún más complicado. Si bien los padres mayores y los abuelos no tendrían objeción para quedar al cuidado de los suyos, hay quienes estarían en un riesgo enorme…, el mismo riesgo en el que pondrían a los ajenos.

Es el caso de los mendigos que vagan en las plazas y aguardan nada a las puertas de las iglesias ¿Qué van a hacer con los indigentes mermados de sus facultades mentales que deambulan en las ciudades ? A lo largo del año, de los años, la autoridad los ignora olímpicamente -cualquier discurso en contra es una farsa para recaudar fondos y organizar cenas ‘de beneficencia.’

5. Después del 30 de abril, se emitirán lineamientos para el regreso escalonado a las diferentes actividades.

El 30 de abril, es jueves; y el 1 de Mayo, Día del Trabajo, es inhábil, así que el regreso a las aulas sería el lunes 4. Hasta ahora nadie habla de un semestre perdido, pero las clases a distancia no resultan, ni de lejos, lo que se soñó y prometió y los calendarios de exámenes ya se fueron al traste.

En sus espacios digitales lLas universidades privadas animan a los estudiantes a continuar, a no alejarse del alcance docente y a perfilar su reinscripción, para lo que no pocas ofertan descuentos en las colegiaturas de estos meses aciagos, y el congelamiento de esas cuotas en los cursos venideros. En la pirinola, la cara en suerte sería: ‘Todos sufren.’

6. Se deberán posponer todos los censos y todas las encuestas que involucren interacción física.

Este punto se leyó así, a vuelapágina, pero es clara la dedicatoria al Censo Nacional del Inegi 2020. Freno a las encuestadoras que todavía esa tarde recorrían incansables las calles de las ciudades y las comunidades, folios en mano. Curiosamente, ayer todavía brigadas contra el dengue, del Gobierno del estado, levantaban datos casa por casa a pesar de que la instrucción es clara: ningún censo, ninguna encuesta cara a cara.

7. La aplicación de estas medidas deberá realizarse con apego a los derechos humanos.

El enunciado no debiera requerir mayor explicación… A menos que se trate de la Procuraduría Estatal de los Derechos Humanos de Guanajuato.

“Durante esta contingencia, seguiremos atentos de que se respeten los derechos humanos. Continuaremos ofreciendo nuestros servicios y atención directa mediante la página web, vía telefónica, whatsapp, redes sociales, correo electrónico y la aplicación de dispositivos móviles -escribieron en tuiter, y esto aplica, claro, si usted no tiene objeción a que lo atiendan en pantunflas…”

LA JAULA

María Elena Ferral, reportera del Diario de Xalapa, murió acribillada a tiros. Le dispararon desde una motocicleta ¿Otra muerte de una periodista a la lista de la impunidad?

Correspondencia: [email protected]