Atrapados

Por Francisco Javier Mares

“Vecinos de la calle San Pedrito, en la Nueva Candelaria, en el barrio del Coecillo, vieron pasar un auto desde el que arrojaron bolsas de plástico negro hacia las banquetas, casi al llegar al bulevar Vicente Valtierra, a las puertas de la escuela secundaria federal número uno. Serían las once de la noche. Las bolsas contenían los restos desmembrados de un hombre. Había también un mensaje amenazante, escrito en una cartulina…”

Hay asesinatos a tiros al mediodía, de noche, de madrugada.

En sus vehículos; en las viviendas; en el puesto de tacos y en los restaurantes; en los talleres y en los bares; en el trago esquinero; en la barbería; en la barriada; en los ‘ghettos’ del Infonavit; en las comunidades rurales; en los cinturones de miseria; en la zona residencial y comercial ‘dorada’…

Cuerpos desmembrados de mujeres y hombres anónimos, en bolsas de basura, envueltos en cobijas, tirados al paso a la vera de los arroyos, en el cruce de los bulevares, en las calzadas del paseo familiar…

Hasta las tres de la tarde de este domingo, en León se habían cometido 75 asesinatos en el mes que corre, julio. En León, en promedio, asesinan a tres personas diariamente…

La violencia homicida, impune, en la ciudad de León, está absolutamente fuera de control.

De acuerdo con el Censo 2020 del INEGI, la población del estado de Guanajuato es de 6 millones 166 mil 934 personas. Ocupa el lugar 6 nacional. León tiene un millón 721 mil 215 habitantes, es el tercer municipio más poblado de todo el país.

Según Rosa Icela Rodríguez, la secretaria federal de Seguridad, en el corte más reciente, seis estados concentran el 50.4 por ciento de los homicidios dolosos: Guanajuato, Baja California, Jalisco, el Estado de México, Michoacán y Chihuahua.

Los 15 municipios ‘de atención prioritaria’, que compendian el 27 por ciento de los asesinatos en el país, reportan una caída de 6.1 por ciento en lo que lleva este 2021… con excepción de León, Cajeme, Acapulco, Guadalajara, Chihuahua y Morelos.

En la contención de la violencia criminal, nada parece funcionar en Guanajuato, menos, en León.

La seguridad fue una de las ofertas principales del panismo, al hacerse cargo del Gobierno de León, hace ya más de tres décadas.

En la primera mitad de los 90′ -en la década anterior, en asuntos del crimen organizado, ‘la nota’ eran los plantíos de mariguana y las pistas clandestinas, y la policía judicial federal apenas asomaba la nariz en este patio-, se conocía a los uniformados de León como ‘la mejor policía del país’. Tiempos de asaltos bancarios, los delincuentes y los policías se jugaban la vida en cada episodio, y no pocos de ambos bandos cayeron -prácticamente imposible que un asalto bancario se cometiera con éxito en la ciudad-. Quién sabe si la prédica del slogan fuese acertada, lo segundo sí era totalmente cierto.

Carlos Medina, Eliseo Martínez, Luis Quirós, Jorge Carlos Obregón, alcaldes todos empeñados en el control de los delitos patrimoniales -of course-, transitaron si mayores problemas, como no fueran los apuñalados en las peleas campales de fin de semana en la periferia.

Con el Siglo 21 -mero dato anecdótico: de 2000 a 2012, el PAN ostentaba la presidencia de la República, la gubernatura de Guanajuato y la alcaldía de León-, el crimen fue a más y el orden a menos, a mucho menos… Hoy, la delincuencia corre sin freno en esta ciudad.

Todavía Luis Ernesto Ayala y Ricardo Alanís -en la administración estatal del Juan Carlos Romero Hicks, que concluyó sin alertas diarias o acusaciones de corrupción mayores-, desahogaron sus trienios sin que al municipio se le identificara como el ‘foco rojo’ nacional que es ahora.

En 2006, a Vicente Guerrero Reynoso tocó en (mala) suerte coincidir con el arranque del sexenio de Juan Manuel Oliva en la gubernatura; las cosas comenzaron a descomponerse.

En la gestión de Ricardo Sheffield -2009-2012-, panista entonces, la delincuencia organizada desató las ejecuciones a sangre fría, a la vista de todos. Sus tres secretarios de seguridad pública, son prueba plena del acertijo indescifrable que había trazado la violencia -En 2014, con Miguel Márquez como gobernador, en la zona de influencia de Celaya apareció el ‘Cártel Santa Rosa de Lima’, oriundo de Villagrán, y desde entonces todo ha sido un desastre…

UNA PAUSA Y REGRESAMOS

María Bárbara Botello Santibáñez, priista, les cortó el hilito y fue la primera Alcaldesa en la historia de la ciudad. Trajo los ‘desfiles’ militarizados de fin de semana en las avenidas de la ciudad, las rancherías, las colonias y los barrios, con resultados tan ridículos como los arrestos por beber cerveza u orinar en la vía pública.

En 2015, heridos, los panistas enviaron a su ‘dream team’ a las elecciones. Un candidato a presidente municipal, Héctor Germán René López Santillana, que había sido gobernador sustituto, y en sus flancos, como síndicos, el primer Alcalde de León y primer Gobernador -interino- panista de Guanajuato, Carlos Medina, y otro exalcalde, Luis Ernesto Ayala -quien en septiembre será el nuevo pastor del Congreso del Estado.

Sucedió lo que tenía que suceder -y ‘Tigres…’, lo advirtió desde el momento mismo del anuncio de la planilla-: aquello acabó como una auténtica ‘hoguera de vanidades’, con la seguridad de la ciudad como la primera víctima… mortal.

Medina y Ayala se fueron. A Héctor Germán René lo reeligieron en 2018. Ahí sigue. Para León -salvo para el ‘Círculo Amigo’-, han sido seis años -que felizmente concluyen a la media noche del nueve de octubre próximo- perdidos, de consecuencias negras aún sin medir cabalmente. León naufraga en un mar de violencia -asesinado por los hechos el discurso patético de culpar a la esfera federal, el alcalde, simplemente, calla y huye.

Héctor Germán René hizo lo más fácil, entregar el mando de la Policía municipal al secretario de Seguridad estatal, Alvar Cabeza de Vaca. El jefe de los municipales es Mario Bravo, exguardaespaldas del gobernador Diego Rodríguez -Mario Bravo ha consumido el sexenio en la grilla del ‘C-4’ y en sus problemas públicos con las manifestantes que salen a la calle a exigir sus derechos.

Los asesinatos se multiplican con mayor crudeza, solo para que en su perímetro se desarrolle, con monotonía y hasta la saciedad, el mismo ritual: desconocidos acribillan a desconocidos; el vecindario da la alarma; llegan los municipales; los mirones; el personal forense; los ministeriales; los federales y los militares. Se recuperan los cadáveres. Nadie vio nada. La historía se contará otra vez y otra y otra…

En 45 días más, cambiarán algunas caras de la administración municipal. El 10 de octubre, la panista Alejandra Gutiérrez Campos rendirá protesta como la segunda mujer al frente del Gobierno de León -que se fundó en 1576 y ha apagado las velitas de 445 pasteles de Aniversario -con o sin feria.

A juzgar por sus dichos públicos en campaña, que evidenciaron un desconocimiento total y hasta desdén por la violencia en el municipio, la eventual respuesta de Alejandra Gutiérrez al ¿Qué Hacer?, aterra.

Hasta ahora, de Alejandra Gutiérrez conocemos sus ‘jingles’ y sus ‘selfies’. En los días recientes, que se va a tomar café con sus opositores -es un decir-, en la elección -en un discurso políticamente correcto, pero absolutamente intrascendente-. Nada Más. De alguna propuesta concreta en materia de seguridad, nada -en la Ibero, de plano, dijo que ella iba ‘a escuchar’.

La primera incógnita a develar es la del destino laboral de Mario Bravo, en la nómina municipal. A nadie sorprendería que lo ratificara, a pesar de su incapacidad manifiesta en el cargo -y su cercanía con el equipo corto del gobernador, o precisamente por eso mismo-. De ahí en más, nadie espera grandes cosas del gobierno en puerta.

Nadie.

(A) LA JAULA

De Feria en Feria.

Afectados por la ‘Covid-19’, en el estado han muerto 11 mil 329 guanajuatenses. Los contagios acumulados suman 136 mil 919. En el informe más reciente, se inscribieron 193 contagios nuevos y cinco muertes. En León, se han contagiado del coronavirus SARS-CoV-2, un total de 45 mil 743 personas. Han muerto 3 mil 843. En la jornada de sábado a domingo, se contagiaron 93 más. Murieron dos. La autoridad reconoce dos contagios de la variante ‘delta’ en la entidad. Ese es el contexto en el que los gobiernos del estado y del municipio, organizaron durante 23 días la ‘Feria de Verano’ en León. Ya acabó. Ahora sí, oficialmente, desde este lunes el semáforo ‘épidemiológico y de reactivación económica’ de Guanajuato, retrocede de verde a amarillo…

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