Dulce Ivana

Por Francisco Javier Mares

Dulce Ivana, su muerte hunde en el miedo y la rabia a una sociedad harta de los hechos de sangre, de la incompetencia de la autoridad, de la impunidad; del otro lado se reduce a la incorporación de otro puntito en el cuadriculado de la estadística fatal…

A lo largo de 10 días, la Alerta Amber por la desaparición de Dulce Ivana urgió una respuesta oportuna desde el tejido de las redes.

Reporte Num: FGEG -AAGTO -054/2019. Fecha de los hechos: 10 de Diciembre 2019/ Lugar de los hechos: León, Gto./ Nombre: Dulce Ivana Núñez Martínez/ Fecha de nacimiento: 02-11-2003/ Edad: 16 años/ Sexo: Mujer/ Nacionalidad: Mexicana/ Tipo de cabello: Largo, lacio/ Color de cabello: Castaño claro, teñido/ Tipo de ojos: Café obscuro/ Estatutra: 1.55 Mts./ Peso: 60 Kgs./ Vestimenta: Sin dato/ Señas particulares: tiene diversos tatuajes en el brazo izquierdo y dos lunares pequeños, uno en un costado y otro en la pierna izquierda.

Esta vez, no hubo suerte, prontitud, eficacia. A Dulce Ivana la encontraron muerta.

La última vez que la vieron con vida fue el martes 10 de este diciembre en la colonia Valle del Sol, de la ciudad de León. A media mañana había iniciado el proceso para intentar su ingreso a una preparatoria en la zona de Panorama. La habrían encontrado el jueves 19, en algún paraje de la comunidad Mesa de Ibarrilla, al norte de la urbe. Habían intentado quemar su cuerpo.

Ese día, la Alerta Amber fue ‘Desactivada’ -nunca como en estas circunstancias, ultilizado de manera tan infortunada el término-, sin que los suyos supieran por qué. Al siguiente se conoció del desenlace de la búsqueda, al siguiente, de la inevitable calificativa de su destino, y de la detención de un presunto responsable -en hechos presentados a la población casi cronómetro en mano, inevitable la sensación de una programación fría.

Fue detenido, pues, Antonio «N», de quien hasta ayer temprano no habían trascendido todavía el resto de sus generales, ni la relación familiar o afectiva, si existieron, con la víctima. La Fiscalía le imputa el delito de feminicidio. El juez resolvió su inmediata vinculación a proceso, y ordenó que enfrente los cargos en prisión.El inicio tortuoso del papeleo que torna la tragedia humana en mero expediente judicial.

Todavía se desgañitan en los pasillos de los campus de la Universidad de Guanajuato las cartulinas con las consignas de protesta por la muerte de Ana Daniela Vega, a manos de un exnovio; a nada, el Estado, León, en turno, entregan al Anuario Rojo 2019, un nuevo caso de feminicidio.

¿Y LA ALERTA DE GÉNERO?

A todo escarceo, Guanajuato -léase, su gobierno estatal- sumen lo que sumen las estadísticas, las protestas y el dolor de miles, ha dicho ¡No! a la ‘Alerta de Género’, como una alternativa para prevenir, perseguir y castigar la violencia contra las mujeres, antes que como Ana Daniela y Dulce Ivana, por ejemplo, encuentren el mismo final a sus vidas.

La información oficial del gobierno de México define que la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres implica acciones de emergencia para enfrentar y erradicar la violencia feminicida y/o la existencia de un agravio comparado que impida el ejercicio pleno de los derechos humanos de las mujeres, en un territorio determinado -municipio o entidad federativa.

La violencia feminicida es la forma extrema de violencia contra las mujeres por el solo hecho de ser mujeres, ocasionada por la violación de sus derechos humanos, en los espacios público y privado, integrada por las conductas de odio o rechazo hacia las mujeres, que pueden no ser sancionadas por la sociedad o por la autoridad responsable y puede terminar en homicidio y otras formas de muerte violenta.

Apenas el 21 de noviembre pasado, la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, decidió la activación de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres en la Ciudad de México. La capital de la República es así la entidad número 19 en echar mano de este mecanismo contra la violencia hacia mujeres y niñas.

Antes de la Ciudad de México, 18 entidades habían activado ya esta alerta de género en todos o en algunos de sus municipios: el Estado de México, Morelos, Michoacán, Chiapas, Nuevo León, Veracruz, Sinaloa, Colima, San Luis Potosí, Guerrero, Quintana Roo, Nayarit, Zacatecas, Durango, Campeche, Oaxaca, Puebla y Jalisco.

Al otro extremo del ideario se ha decidido no declarar alguna Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres, en siete ocasiones:

Sí, en Guanajuato, el 30 de junio de 2015 se notificó la no procedencia de la AVGM -el exgobernador Miguel Márquez Márquez, es un político un poquito más a la derecha de estas posibilidades-; Baja California, el 19 de mayo de 2016; Querétaro, el 9 de febrero de 2017; Puebla, 7 de julio de 2017; y el 4 de agosto de 2017, Cajeme, Sonora; Tabasco y Tlaxcala.

De la muerte de Dulce Ivana, los funcionarios -del resto de los políticos que gravitan en los partidos, ni hablamos-  se enteran, si lo hacen, en vacaciones; el aparato de Procuración de Justicia, pone en manos del Poder Judicial el legajo del caso; las y los diputados en nómina vigente, tan proclives a legislar para la tribuna -sobre todo en materia de género-, concluyeron justo el jueves 19 su Primer Periodo Ordinario de Sesiones del Segundo Año de Ejercicio. Se esfumaron. Queda a la sociedad la reacción, la exigencia, el enojo, la impotencia…

LA JAULA

Este miércoles 25 de diciembre, ‘Tigres…’, hará una pausa brevísima; escribir de políticos, funcionarios y tragedias -al caso, la misma cosa- en Navidad, sería, al menos, de mal gusto.

Correspondencia: [email protected]