Diálogo de sordos

Por Francisco Javier Mares

La guerra de mensajitos entre ‘Los 10’ y el presidente de la República, además de improductiva se torna francamente aburrida…

Uno esperaría de los jefes políticos de 10 de las 32 entidades soberanas del país -incluida la CdM-, y el primer mandatario de la nación un mejor juicio y mayores alcances, pero no.

Tempranito, este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador se ocupó del más fresco de los recados que le envían un día sí y el otro también, los 10 gobernadores caracterizados como ‘La Alianza Federalista’, entre los que forma el de Guanajuato, Diego Rodríguez.

Presto -es de lo más divertido que cada mañana se le ocurra algún gráfico y este se encuentre a la mano-, pasó revista al catálogo de las participaciones federales que reciben los estados aliancistas:

Chihuahua, del panista Javier Corral, 19 mil 611 millones de pesos; Nuevo León, del ‘independiente’ Jaime Rodríguez, 30 mil 622 millones de pesos; Jalisco, de Enrique Alfaro, salido de Movimiento Ciudadano, 42 mil 565 millones de pesos; Michoacán, del perredista Silvano Aureoles, 20 mil 429 millones de pesos… y Guanajuato, del blanquiazul Diego Rodríguez 28 mil 163 millones de pesos -por citar únicamente a sus voceros ocasionales.  

En la versión federal, estos números serían los que manejan los estados “de manera directa, autónoma”, pero que se beneficiarían también de pensiones, becas y otros que no pasan por su caja registradora… -además de la proverbialmente vilipendiada obra pública federal directa que regatea el lucimiento a las esferas locales.

Así que pues no, no se les debe nada, sonrió AMLO.

Acto seguido los dirigió a la ventanilla de quejas del secretario de Hacienda, Arturo Herrera; y de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; para que allá los atiendan -si algún día le hacen llegar la carta en la que presuntamente le solicitarían que en el presupuesto del próximo año se mantenga lo que se envió en este 2020, porque hasta ahora, dijo, no la ha recibido.

Ello, aunque tampoco le ve mucho sentido, ‘el asunto ya no es conmigo’, se frota las manos Andrés: “esto -que se les entrega- es lo que establece la Ley, hay que modificar la Constitución, tendrían que presentar una iniciativa para que cambie la fórmula de la Ley de Coordinación Fiscal… Es un asunto constitucional y lo tienen que ver con la Cámara de Diputados”.

Y, sí. Les recuerda que la reforma más reciente a la Ley de Coordinación Fiscal se realizó en el gobierno de Felipe Calderón y fue votada en el Congreso de la Unión por algunos de los que ahora son gobernadores “y están pidiendo más recursos, se me hace muy incongruente, poco serio” -en alusión personal a Javier Corral, el gobernador panista de Chihuahua.

Pero de entrada, no, nada de conformar un ‘fondo de estabilización’, como el que piden ‘Los 10’, que porque la estrategia de recuperación económica del gobierno federal ha funcionado -puso como ejemplo la recuperación de 200 mil empleos en octubre y la estabilidad de la paridad del peso frente al dólar.

Para AMLO, esa petición es más de lo mismo, ‘en su momento propusieron que el gobierno se endeudara y apoyara arriba a las corporaciones…’

10 DE 32

La ‘Alianza Federalista’ por donde se le vea, es una mera escisión de la ‘Conferencia Nacional de Gobernadores’, la Conago, que agrupa -hasta donde sabemos no ha sido disuelta-, a la totalidad de los mandatarios de los estados del país. Los acuerdos que alcanzan en su seno los aliancistas, cualesquiera que éstos sean -y menos en tratándose de los dineros-, no van a dejar satisfechos a todos los gobernadores, excluido el resto sin voz ni voto ¿O ‘Los 10’ suponen que hablan a nombre de todos? ¿Sus propuestas satisfacen lo mismo a Oaxaca que a Nuevo León? ¿ A Guerrero que al Estado de México? ¿A Guanajuato que a la Ciudad de México?

Que la Conago ya no es un interlocutor viable ante el gobierno federal, acusan ‘Los 10’. Probablemente sea cierto. Pero su eventual falta de independencia y consistencia sería atribuible a ellos mismos, no al Ejecutivo federal. Una responsabilidad absoluta de los gobernadores, que para ello la integraron como un movimiento legítimo y autónomo, a iniciativa del bloque perredista entonces.

AMLO ya les dijo que no los va a recibir, que le parece que estos gobernadores han sido groseros con la investidura presidencial. Bueno, hasta el membrete les criticó en ‘la mañanera’:

“¿Cómo que federalistas? El federalismo se ha hermanado siempre con el liberalismo. El conservadurismo se ha hermanado siempre con el centralismo ¿De dónde salen conservadores federalistas? Hay que tener más rigor, hasta en lo intelectual”. Zas.

Pa’ pronto los gobernadores en mención echaron mano a su twitter para rechazar que sean opositores al Gobierno de México y pedirle al presidente “que deje de dividir al país…”

El caso es que no avanzan. Uno y otros son el mismo sonsonete todos los días. Cansan -aún en el entendido de que la intención de los dos bandos sea en realidad mantener despiertos a sus bloques de electores rumbo al proceso electoral del 21 -en Hidalgo y en Coahuila, ya les madrugó el Revolucionario Institucional.

Por lo que respecta a Diego Rodríguez, parece decidido a perseguir desde ya el espejismo federal…

El gober de Guanajuato en la misma red se fue al vídeo para ‘explicar’ cómo es que ‘los recortes’ van a afectar a los ciudadanos de esta muy sufrida entidad, “en sus bolsillos y en sus vidas”.

Que Guanajuato recibió en convenios 22 mil millones de pesos menos -nada de que hay obra pública federal en el estado.

Y que para el año venidero el estado “recibirá otro golpe con otra disminución de 7 mil millones de pesos de acuerdo a la propuesta del presupuesto federal” -en cuentas que en un sentido o en otro, en su momento tendrían que explicar los diputados federales por Guanajuato, y no solo los azules.

“Hoy nuevamente le pedimos al presidente que nos reciba; en Guanajuato no podemos aceptar menos recursos de los que tenemos hoy”, suspira el gober en un capítulo más de este melodrama que, ni modo, va para largo.

(A) LA JAULA

La pausa.

Mientras averiguamos si México vivirá el ‘más vale malo conocido que bueno por conocer’ en EU, acá los leones deleitan nueva presa: Luis Videgaray, el exsecretario de Hacienda, de Relaciones Exteriores y ‘hombre fuerte’ de Enrique Peña Nieto es acusado de cohecho, delitos electorales, asociación delictuosa y traición a la patria, por la Fiscalía que encabeza Alejandro Gertz Manero. Tampoco devolvió dos libros a la biblioteca.

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