Expatinadora profesional ahora vive en las calles

El mundo del deporte profesional es una carrera llena de altibajos, y la historia de Elena Gouliakova es un ejemplo de ello, una exestrella del patinaje sobre hielo que ahora vive en las calles de Jalisco.

La atleta rusa llegó a México junto con su esposo Nikolay Suetov en busca de una oportunidad para enseñar patinaje y compartir su talento con los amantes de este deporte.

Durante su estancia en Nuevo León, Elena y su esposo lograron obtener empleo como profesores de patinaje en un instituto en Monterrey, lo que les permitió integrarse a la Asociación de Deportes Invernales del Estado y a la Federación Mexicana de Patinaje Sobre Hielo y Deportes de Invierno.

A través de su dedicación y habilidades, obtuvieron rápidamente la nacionalidad mexicana, lo que les brindaba una sensación de estabilidad y arraigo en su nueva patria.

Sin embargo, las cosas comenzaron a cambiar en el año 2006, cuando Elena pareció caer en depresión. Aunque no está claro qué desencadenó esta situación, se especula que la separación de su esposo pudo haber sido un factor determinante en el declive de su vida.

A partir de entonces, su situación empeoró y en febrero de 2016 se informó que Elena estaba internada en el área de psiquiatría del penal de Topo Chico, en Monterrey.

El caso de Elena Gouliakova llamó la atención de la asociación Renace, que se dedicó a investigar el motivo de su detención y situación de calle.

A finales de 2022 volvió a ser vista en el municipio de Tepatitlán, Jalisco, en estado de indigencia.

Un video que circula en redes sociales la muestra caminando junto a sus mascotas y aparentemente ignorando la ayuda que se le ofrecía.

Debido a esta situación, los habitantes de Tepatitlán lanzaron una campaña en redes sociales para apoyarla y contactar a sus familiares en Moscú para que puedan brindarle ayuda.