¡Guau!

¡Finge ser un maniquí para robar en tienda departamental!

La historia de este insólito ladrón se ha vuelto viral en las redes sociales, convirtiéndose en un tema de conversación en todo el mundo

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Un sorprendente episodio delictivo ha sacudido a la ciudad de Varsovia, en Polonia, donde un joven de 22 años ha sido acusado de llevar a cabo una serie de robos en un centro comercial empleando una estrategia que desafía la imaginación y que ha dejado atónitos a muchos.

La historia de este insólito ladrón se ha vuelto viral en las redes sociales, convirtiéndose en un tema de conversación en todo el mundo.

El astuto delincuente, cuya identidad aún no ha sido revelada por las autoridades, protagonizó una serie de robos en un tranquilo centro comercial de la capital polaca, Varsovia, utilizando una estrategia sorprendente: hacerse pasar por un maniquí en uno de los escaparates del lugar.

Su táctica, aunque simple, resultó ser inusualmente efectiva, ya que le permitió llevar a cabo sus robos sin levantar sospechas.

Este joven delincuente fue captado por las cámaras de seguridad mientras permanecía inmóvil en el escaparate de una tienda, mezclándose entre los maniquíes.

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Sin realizar ningún movimiento que delatara su presencia, esperaba pacientemente hasta que las tiendas cerraban sus puertas, momento en el que «despertaba» y se apoderaba de los objetos de su interés.

Este inusual método le permitió perpetrar múltiples robos con éxito, manteniendo a raya tanto a las autoridades como al personal de seguridad.

Sin embargo, su racha de impunidad llegó a su fin cuando una cámara de seguridad finalmente capturó su peculiar acto.

Durante horas, nadie había sospechado que entre los maniquíes se encontraba un ser humano, pero las imágenes de video revelaron el momento en que el joven, aún fingiendo ser un maniquí, sostenía una bolsa de una tienda.

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No obstante, este no era el único incidente en el que el acusado utilizó su sorprendente táctica delictiva.

En una segunda ocasión, se hizo pasar por un comensal en un restaurante y aguardó hasta que el establecimiento cerró sus puertas.

Luego, se infiltró en una tienda de ropa, cambió su apariencia y regresó al restaurante para repetir su artimaña.

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Finalmente, se deslizó de manera sigilosa a través de las contraventanas parcialmente abiertas de una tienda de ropa, siendo capturado por las cámaras de seguridad en el acto.

Este joven inusual, que demostró un ingenio sorprendente, enfrenta cargos por robo y hurto en Polonia, delitos que conllevan una posible pena de hasta 10 años de prisión.

Su identidad sigue siendo un misterio, pero las imágenes de seguridad finalmente lo llevaron a la detención, poniendo fin a su singular carrera delictiva.

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