Revolucionan la aeronáutica con su «auto volador» J-2000

La industria aeronáutica avanza hacia un futuro que parece sacado de la ciencia ficción. En Seattle, Estados Unidos, la empresa Jetoptera está desarrollando tecnologías que prometen transformar la movilidad aérea, destacando su innovador «auto volador» J-2000.

Lanzado como prototipo en 2021, el J-2000 rompe con los esquemas tradicionales al eliminar las hélices, comunes en drones y aeronaves ligeras, y reemplazarlas con un sistema de propulsión revolucionario.

Tecnología innovadora

El núcleo del diseño del J-2000 es un generador de aire integrado en el fuselaje. Este sistema produce un flujo de aire que, al pasar por un ventilador instalado en un ala de diseño circular, multiplica la presión hasta 16 veces. Esta configuración genera una potencia superior a la de las hélices tradicionales, con un menor consumo energético.

El generador de aire compacto también reduce el peso del sistema y la necesidad de energía, mejorando la autonomía de la aeronave. Según Jetoptera, su sistema de propulsión incrementa la eficiencia en más del 10 % y disminuye el consumo de combustible en más del 50 % en comparación con turborreactores pequeños. Además, es un 30 % más ligero que los turbofans o hélices convencionales.

Los desafíos del futuro

A pesar de estas innovaciones, Jetoptera enfrenta retos para alcanzar la total funcionalidad de sus vehículos. Actualmente, las baterías disponibles en el mercado solo alcanzan una capacidad de 260 watts por hora (wh/h), insuficientes para alimentar los motores del J-2000, que requieren al menos 1500 wh/h.

Por ello, la compañía utiliza un sistema interno a base de gas capaz de generar entre 75 y 1200 kilowatts, dependiendo del modelo. Aunque esto resuelve parcialmente el problema, la dependencia de combustibles fósiles es una barrera para lograr una aeronave completamente sostenible.

Una flota de innovación

Jetoptera cuenta con siete prototipos en desarrollo. Cuatro de ellos están diseñados para despegar y aterrizar en vertical, mientras que los tres restantes operan de manera convencional, utilizando una pista de despegue.

Entre los modelos más destacados están el J-2000 y el J-4000, que combinan capacidad de carga y eficiencia. Estas aeronaves podrían marcar el inicio de una nueva era en la aviación, ofreciendo soluciones más ligeras, eficientes y menos contaminantes.

Aunque aún enfrenta desafíos técnicos y de infraestructura, Jetoptera representa un paso significativo hacia el futuro de la movilidad aérea, acercándonos al sueño de los «autos voladores».