Las personas le están rezando a este santo para ganarse la lotería

La relación entre la religión y las aspiraciones personales se encuentra profundamente arraigada en muchas culturas, y la figura de San Cono, conocido como el «patrón de los jugadores de lotería», es un claro ejemplo de cómo la espiritualidad se entrelaza con la búsqueda de suerte y prosperidad.

Venerado en Italia y América Latina, San Cono se ha convertido en un símbolo de esperanza para aquellos que desean un golpe de suerte, especialmente en los juegos de azar. Su historia, repleta de eventos extraordinarios, ha sido transmitida a través de los siglos, consolidándolo como un ícono de fe y milagros.

Un santo marcado por lo extraordinario

San Cono, también conocido como San Cuneus o San Canus, nació a finales del siglo XI en Teggiano, al sur de Italia, en una familia devota y mayor de edad. Según la tradición, su nacimiento estuvo precedido por un sueño de sus padres, quienes vieron una llama en forma de cono saliendo del vientre materno, un augurio interpretado como una señal divina.

Desde su juventud, Cono mostró una inclinación religiosa excepcional. A pesar de la oposición inicial de su familia, decidió unirse a la orden benedictina, un acto que, según la tradición, marcó el inicio de su camino hacia la santidad.

Uno de los eventos más recordados de su vida es el milagro del horno encendido. Cuando sus padres intentaron obligarlo a regresar a casa, Cono se escondió en un horno encendido y salió ileso, lo que convenció a su familia de que su vocación era un designio de Dios.

Falleció joven, el 3 de junio, luego de recibir un mensaje celestial que anunciaba su muerte. Sus restos descansan en Diano (hoy Teggiano), luego de un milagro conocido como la Traslación, en el que bueyes guiaron su cuerpo al lugar de su última morada.

Milagros y devoción

San Cono es recordado por varios milagros, tanto en vida como después de su muerte. Entre ellos, destaca su intervención durante el terremoto de 1857, cuando su pueblo natal quedó prácticamente intacto a pesar de la devastación en la región de Campano-Lucana.

Su festividad, celebrada el 3 de junio, atrae a fieles de todo el mundo, especialmente en comunidades de emigrantes italianos en Uruguay y Argentina. En estos países, San Cono es visto como un símbolo de buena suerte y abundancia.

El santo de la lotería

Quizá el aspecto más curioso de su devoción es su asociación con los juegos de azar. En América Latina, muchos fieles recurren a San Cono para pedir ayuda en la elección de números de lotería, convencidos de que su intercesión puede atraer la fortuna.

La imagen de San Cono, con su distintivo halo y mirada serena, se ha convertido en un emblema de fe para quienes buscan una chispa de esperanza en los momentos de incertidumbre. Su historia trasciende el tiempo y las fronteras, recordándonos que la fe puede manifestarse de formas inesperadas, incluso en la búsqueda de la buena suerte.

Oración a San Cono 

¡Oh milagroso San Cono!

Santo patrono de las cábalas,

Santo de los jugadores de la lotería,

ayúdame con tus favores.

Yo (tu nombre) recurro a ti con fe,

por que sólo un milagro tuyo

podrá darme el dinero que necesito.

Tú que desde el cielo prodigas

milagros a las personas que buscan

suerte en los juegos de azar y lotería 

dame la suerte que necesito.

¡Oh milagroso San Cono!

Escucha mis plegarias, socórreme

en mis necesidades dame suerte,

dame dinero, aumenta mi esperanza…

¡Amén!